Un documental compuesto por fotografías de la época y una voz en off, compuesto por capítulos sobre diversos aspectos de la zona situada lejos del frente de la Guerra Civil.
Intenta retratar cómo hubiera sido la película de propaganda bélica realizada en esos momentos, con esas locuciones engoladas de la época.
El texto es de clara inspiración comunista, escuchado con los oídos de 2024 resulta, en ocasiones, cómico, pero ilustrativo.
La valoración de esta película puede ser muy diferente según la óptica que sea interpretada.
El que vaya a verla con la idea de una película histórica, saldrá escandalizado.
El que acuda pensando en ver una segunda parte continuista a un nivel parecido, saldrá decepcionado.
El que pretenda ver una una película con coherencia argumental y personajes bien construidos saldrá horrorizado.
Pero los que vayan a ver un producto divertido, un poco loco, que deje al lado la verosimilitud, se lo va a pasar pipa.
Mi consigna ante esta producción es ¡relájate y disfruta!
Hay que seguir el viejo emblema de los Hombres G: ¡voy a pasármelo bien!
Las cuestiones más locas son las que más me atraen como la pelea con los monos pelados o la piscina en el Coliseo o el monillo del Emperador Caracalla. Putas locuras.
Fui con mis hijos y nietos y se lo pasaron fenomenal. ¡Qué más se puede pedir de una película!
Después de haber pasado por San Sebastián (ganadora de la Concha de Oro a la Mejor Película y de otros dos galardones), Nueva York, Montreal, Tokio, Viennale o Los Ángeles, ahora desembarca esta producción en el Festival de Gijón.
Perdimos la oportunidad de verla en Donosti. Un documental sobre toros dirigido por Albert Serra no era algo atrayente en origen.
La Concha de Oro y las numerosas críticas favorables la habían convertido en una asignatura pendiente obligada.
Mi expectación era máxima y mi decepción ha sido mayúscula.
Comprendo que a personas que nunca han visto una corrida de toros desde cerca le pueda impresionar la sangre, el riesgo, el sufrimiento del animal, las conversaciones de la cuadrilla y esa mística que rodea al torero y a la corrida con sus códigos teatrales e impostados.
Yo he visto decenas de corridas de toros desde el callejón. He visto la agonía del toro y las cornadas. He visto el sudor y el dolor. He visto en algunas ocasiones grandeza (pocas) y en otras la mezquindad (muchas).
Este documental de Albert Serra no me aporta nada nuevo. Las imágenes son impactantes en un principio con unos planos muy cortos que nos impiden ver de verdad el arte del toreo.
Pero esta manera de filmar satura en unos pocos minutos, dándome la sensación en su última media hora que estoy volviendo a ver los mismos planos.
Comprendo a los antitaurinos que han denostado el film. Albert Serra retrata bien la mística del torero con sus rituales y sus ceremonias, incluso lo mitifica.
Me ha parecido que había una cierta justificación de la tortura del animal, como necesaria para crear espectáculo y arte.
Oír a Albert Serra no tiene desperdicio. Grabé parte de sus declaraciones antes y después de la proyección en el Teatro Jovellanos de Gijón. No os las perdáis.
Producción danesa dirigida por Gustav Möller y protagonizada por Sidse Babett Knudsen, que se aparta del drama carcelario habitual para contar una historia de venganza.
Habitualmente las películas de prisiones son historias de redención y de superación en ambientes hostiles, intentando, además, denunciar un sistema embrutecido y alienante. Como por ejemplo, el film mejor valorado de la historia del cine, Cadena perpetua, que a mí me parece una engañifa.
En esta película la protagonista es una funcionaria de prisiones, de las que vamos descubriendo un doloroso pasado y cómo ella busca una satisfacción en la venganza.
El director humaniza a los personajes, pero sin edulcorarlos, incluso, sin dar esperanza.
De fondo el retrato de la institución penitenciaria con sus elementos violentos y desagradables.
Me ha gustado como se presenta la diferencia de los internos del módulo de segundo grado a los de primer grado con sus diversas medidas de seguridad y los perfiles diferentes de reos.
Una película valiosa.
Sidse Babett Knudsen, como es habitual, formidable.