Comentario:
Spike Lee nos relata un día en el barrio de Bedford-Stuyvesant en Brooklyn.
En sus calles pululan personajes que son descritos con cierto cariño y que son bien presentados.
Hay un aire caricaturesco en estos individuos.
En este barrio está la Pizzería de Sal (Sal’s Famous Pizza), regentada por un padre y sus dos hijos.
Sal (Danny Aiello) es italoamericano, un hombre de carácter fuerte que ha visto crecer a los jóvenes que van desde niños a comer sus pedazos de pizza, pero su hijo Pino, interpretado por John Turturro, es racista e intolerante.
Cuando salta el conflicto Mookie (interpretado por el propio director) lanza un cubo de basura a la cristalera de la Pizzería. Los negros se lanzan a la destrucción del local, descargando su ira por la muerte a manos de la policía de Radio Raheem.
¿Con ese gesto Mookie impide que Sal y sus hijos sean víctimas (físicas) de la rabia de los residentes?
O tal vez, ¿desate un conflicto que se hubiera podido solucionar?
¿Es el héroe o el villano?
Spike Lee enfrenta las dos posturas en las reivindicaciones raciales: la de Malcolm X y la de Martin Luther King.
No toma posición, pero las dos las admite como posibles.
La peli refleja, de manera certera, el odio racial que habita en el corazón de muchos norteamericanos.
Negros contra chicanos y blancos. Blancos contra negros. Chicanos contra blancos… Y todos contra asiáticos.
El vendedor coreano salva su negocio gritando: “soy negro“.
El retrato aparentemente amable de los personajes es demoledor con la sociedad que habita en ese barrio pobre, donde no hay parques, ni piscinas, ni árboles en las calles.
Donde tres viejos cascarrabias comentan todo el día bajo una sombrilla con el fondo de una tapia naranja.
Donde los niños se duchan con el surtidor de una toma de riego.
Donde un viejo alcohólico salva a un niño de un atropello.
Donde Mookie se escaquea para visitar a su novia Tina (una maravillosa Rosie Pérez)…
Es la realidad norteamericana, ni más ni menos.
Curiosidades:
Spike Lee originalmente quería Robert De Niro para el papel de Sal (Salvatore Fragione).
Pero De Niro rechazó el papel, diciendo que era demasiado similar a muchas de los personajes que había interpretado en el pasado.
Al final el papel fue realizado por Danny Aiello .
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Todas las escenas de los hombres de la tapia (Robin Harris, Paul Benjamin y Frankie Faison) fueron improvisadas.
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Spike Lee escribió el guión en dos semanas.
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El título proviene de una cita de Malcolm X: “Tienes que hacer lo correcto“.
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Esta película fue inspirada por un incidente real en Nueva York, donde algunos jóvenes negros fueron expulsados de una pizzería por algunos jóvenes blancos en un barrio de Nueva York conocido como Howard Beach.
Es el debut en el cine de Martin Lawrence, en un pequeño papel.
Rosie Pérez no quiso que su cara apareciera en la escena de desnudo. Se sintió mal durante el rodaje, llegando a llorar.
Más tarde decidió que no le importaba y apareció desnuda de nuevo en otras películas.
Una escena clave cuando Danny Aiello y John Turturro hablan en la pizzería fue parcialmente improvisada.
El presidente Barack Obama y su futura esposa Michelle Obama vieron esta peli en su primera cita. También habían propuesto Paseando a Miss Daisy (1989).
Hay una pintada que dice: “Tawana dijo la verdad“.
Hace referencia al caso de Tawana Brawley que fue violada y secuestrada en 1987.
Danny Aiello admitió que casi rechazó el papel de Sal cuando vio que interpretaría al dueño de una pizzería, creyendo que era un estereotipo de perezosos italiano-americanos.
La palabra “fuck” se utiliza aproximadamente 240 veces en esta película, a razón de dos por minuto.
Aunque Rosie Pérez, que interpreta a Tina, es una parte importante del reparto pero nunca sale de su apartamento y solo interactúa con Mookie.
Laurence Fishburne se le ofreció el papel de Papá Amor, pero lo rechazó.
El edificio de la Pizzería de Sal no existía antes del rodaje.
Se construyó sobre un terreno vacío por la compañía de producción, y posteriormente fue demolido cuando concluyó el rodaje.
En 2007, el American Film Institute clasificó esta peli en el puesto 96 de las más grandes de todos los tiempos.
Wesley Snipes rechazó un papel en la película por protagonizar Una mujer en la liga (1989), dirigida por David S. Ward.
La primera opción de Spike Lee para el papel de Pino fue Matt Dillon.
Radio Raheem lleva en sus manos los anillos de amor y odio en un claro homenaje a La noche del cazador de 1955, al predicador interpretado por Robert Mitchum.
La secuencia del baile del inicio de Rosie Pérez se inspiró en la secuencia de apertura de crédito con Ann-Margret en la película Un beso para Birdie (1963).
Spike Lee rechazó un papel en Más duro que el cuero (1988) para dirigir esta película.
A Paramount no le gustó el “tono” de la peli y rechazó distribuirla. siendo finalmente Universal la encargada.
Spike Lee dedicó su tiempo libre durante el rodaje de la peli a escribir el guión de Cuanto Más, ¡mejor! (1990).
La peli se desarrolla el 5 de agosto de 1989.
Se incluyen entre los “1001 películas que hay que ver antes de morir “, editado por Steven Schneider.
Muchos besos y muchas gracias.
Crítico de Cine de El Heraldo del Henares
Colaborador de Esradio Guadalajara y Alcarria TV
Canal de YouTube: HolaSoyRamónVídeos
Todos los post ordenados alfabéticamente. Para buscar una crítica de una peli de forma sencilla…
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Ya la había visto poco después de su estreno y me gustó mucho. Ahora me ha vuelto a gustar.
La película engancha desde el principio (que fuerza la de la entrada con Rosie Perez boxeando y bailando al son de “Fight the power” ). En un día de verano, en el que el extremo calor parece jugar también su papel catalizador hacia un final explosivo, Spike Lee nos narra una historia de prejuicios y tensiones intercomunitarias con una amplia galería de personajes (unos desquiciantes, otros entrañables pero todos interesantes y muy bien construidos) y una gama de recursos narrativos que nos muestran magistralmente el frágil equilibrio en qué viven los habitantes del barrio. A ritmo vertiginoso, la iluminación, la fotografía, la banda sonora (Hip-hop del bueno a tope), la ambientación, la escenografía, el vestuario, los movimientos de cámara,….todo contribuye a un crear un clima de tensión que va creciendo a partir de hechos aparentemente cotidianos y en el que uno empieza a intuir que bastará el mínimo golpe de una piedrita para que el cristal salte en pedazos. No hay un protagonista claramente definido. El personaje de Mookie es solo el hilo conductor que nos va llevando casi a modo de cicerone a través de sucesos y personajes hasta construir un análisis de la violencia racial con clara intención pedagógica. No hay buenos ni malos, todo el mundo es tratado con humanidad y comprensión, hasta la policía. Todo el mundo tiene su cuota de responsabilidad en los acontecimientos, incluida la comunidad negra con la que no es precisamente benevolente. Aunque ciertamente en la película hay denuncia referente a la pobreza (económica y formativa) y la marginación, donde más hace hincapié Spike Lee es en el análisis de la condición humana. No es la ideología el principal causante del desenlace final, es un profundo y ancestral sentido tribal de pertenencia a un grupo con claro carácter exclusivo (excluir al otro como parte ineludible del proceso identitario) el que se encuentra en el fondo de lo que finalmente ocurre. Y la única razón que sitúa a unos arriba y a otros abajo es el poder, sobre todo el poder obtenido a través de la violencia. Si el poder cambiara de manos, tendríamos la misma situación, solo que con los actores en posiciones contrarias. Un lastre de nuestra esencia biológica al que la cultura no ha sabido dar solución y por el que la humanidad continúa envuelta en desencuentros interminables y hechos terribles como la guerra.
Danny Aiello esta fenomenal. Según parece, Spike Lee quería que su papel lo hubiera interpretado De Niro, me alegro de que este lo rechazara porque dudo que lo hubiera hecho tan creíble como Aiello. Turturro esta bestial y tampoco él era la primera elección del director, imposible que otro actor lo hubiera hecho mejor. Yo creo que es uno de los mejores papeles de su vida.
A mi entender, una excelente película que todo el mundo debería ver.
Un abrazo.
Muchas gracias admirado Alberto…
Venga, no te pases…muchas gracias Ramón.
Vaya por delante en ésta, mi primera incursión en el blog, que “Haz lo que dabas” es una de mis “pelis de cabecera” desde que tuve la oportunidad de verla cuando se estrenó en Madrid, allá por los 80 del siglo pasado.
Me impresionó tanto hace 30 años como ahora la riqueza en el tratamiento de la imagen :vital, , osada, vibrante, nerviosa, brillantemente desencajada al son de la música y la vida plena del barrio, mostrando sin trabas la alegría de vivir, evidentísima en la desmelenada escena del baño callejero (una magistral escena acuática) ; me gustó mucho la música, variada y de una belleza algo ruda, muy bien elegida para acompañar y subrayar cada escena, música colgada sin pudor de las imágenes violentamente vitales, música fuerte coloreando a gritos los gritos del barrio. La estridencia de sonido original en los diálogos, enriquece muchísimo a la película, casi podría decir que forma parte de la música.
En la película se abordan crudamente ciertos conflictos sociales, los raciales y principalmente los secesionistas derivados de prejuicios de grupo que el que el hombre arrastra como una condena a lo largo de su existencia como ser social; en este aspecto, no creo que pueda decir nada mejor de lo que se ha dicho en los comentarios previos. Sin embargo hay otro aspecto, que me gustaría destacar y que impregna horizontalmente a todos los personajes: la intensa y penosa disyuntiva entre la individualidad de la persona, su propia y exclusiva libertad de emociones, sentimientos y pensamientos que le pueden llevar (o no) a la acción , enfrentándose constantemente al “deber ser, deber hacer, deber decir, no deber…” para poder formar parte de un grupo social coherente que supuestamente le podría aportar seguridad ante la soledad del SER. A mi entender hay dos principales personajes que lo expresan perfectamente, son Sal y Mookie: el primero es realmente un espíritu libre, que elige contra todos no atarse a lo que socialmente más le conviene, está convencido de lo que cree, de lo que siente, de lo que ama y lo lleva hasta sus últimas consecuencias pagando un alto precio por ello pero sin renunciar a su libertad de ser él mismo. Por otro lado está Mookie (¡qué forma de caminar!, me recuerda a Brad Pitt en “El árbol de la vida”) . Mookie, el negro que elige traicionarse a sí mismo, a su manera de pensar, traicionar a su manera de sentir , a su propia individualidad, a su libertad y de esta manera integrarse en el grupo de los suyos, de los negros, “haciendo lo que debe hacer” para ello. A mi modo de ver, ambos personajes expresan muy bien el enfrentamiento íntimo entre estas dos trascendentales y opuestas posiciones que siempre viven como una constante y sorda corriente subterránea en el interior de cada uno de nosotros.
Creo que “Haz lo que debas” es una película muy recomendable para discutir o abordar dos aspectos que determinan fuertemente al ser humano: lo individual y lo social. Lo que se quiere o no hacer, Lo que se debe o no hacer, lo que se elige o no se elige hacer