Cutrecomentario de Ramón:
El médico de los ricos.
Recuerdo haber visto esta superproducción de cartón piedra en la pequeña pantalla de mi televisor en blanco y negro cuando era un niño.
Visionarla en la gran pantalla de un cine como Dios manda, disfrutando del colorido de esa realidad inventada de un Egipto de hace cinco mil años es un placer.
La película es un bodrio de tomo y lomo, pero su tono postizo y falso le da un cierto atractivo.
Resulta cómico ver al actor Edmund Purdom dando vida al protagonista Sinuhé, un médico bastante flojo, una interpretación tan penosa y ridícula que se merece un premio Razzie honorífico.
Hay una apología bastante potente del monoteísmo, como una especie de antecedente del cristianismo que vendría veinte siglos después. Una cuestión bastante extravagante, pero muy de la época.
Me encanta la malvada, a la que da vida la bella Bella Darvi, que es babilonia, de esa ciudad nada bueno se puede esperar, que ejerce de mujer fatal, más mala, que un pecado arrastrando a la perdición a nuestro torpe Sinuhé. Pero el destino le da su merecido. Muy propio de la época, también, moralista en la que se filma.
¡Me lo he pasado bien!
Una cosa: ¿Porqué Víctor Mature lleva la falda tan corta? ¡Bonitas piernas!
Mi puntuación: 4,41/10.
Dirigido por Michael Curtiz:
Música de Bernad Herrmann:
Otros posts relacionados
Muchos besos y muchas gracias.
¡Nos vemos en el cine!
Chistes y críticas en holasoyramon.com
Crítico de Cine de El Heraldo del Henares
Para poner un comentario:
Hay 3 casillas.
En la superior va tu nombre.
En la segunda, la del medio, pon una dirección de correo electrónico.
La tercera, la de abajo de las tres, puedes dejarla en blanco o poner tu web.