Van dos hombres en el Orient Express, en el mismo vagón, solos.
Pasa la mañana. Pasa la tarde. Pasa la noche... y cuando llega el amanecer le dice uno al otro:
- Oiga ¿usted de dónde es?
- Coño, yo soy de Bilbao, ¡ostia!
- ¡Ay va la Virgen! Qué casualidad. ¡Yo soy de Santander!
- Ostia tú. ¡Los dos del Norte!
- ¿Y usted a qué se dedica?
- ¿Yo? soy violinista.
- ¡Me cago en la puta! Que puñetera casualidad. ¡Yo también!
- No puede ser. ¿Tú también violinista? Pues yo toco el violín de cojones, te lo advierto.
- Para buen violinista yo, tío, ¡soy el mejor de España!
- ¿Tú el mejor de España? ¡Vamos hombre, si yo soy el mejor de Europa!
- Mira tío, fíjate si yo tocaré la hostia de bien, que cuando toco el violín en la iglesia de mi pueblo, en Santander, la Virgen de madera llora.
- Para violinista de cagarse yo, que el otro día toqué el violín en la Catedral de Bilbao y de lo bien que lo hice, bajó Jesucristo de la cruz, me dio un abrazo y me dijo: Eso sí es tocar y no lo que hace el cabrón de Santander que hace llorar a mi madre.
Chiste enviado por mi amigo Xano.
Muchos besos y muchas gracias.
Chiste subido por Ramón el El 2012-08-13 a las 19:16:46
Todavía no hay ningún comentario