El recién casado regresa a casa de sus padres mediada la noche de bodas.
La madre se levanta sorprendida a más no poder:
- ¿Qué pasó, hijo mío?
- Verás, mamá... La dejo porque es virgen.
- ¡Bien hecho, hijo! Lo que los demás no quieran, tú no lo has de aceptar.
Chiste subido por Ramón el El 2009-07-02 a las 13:02:45
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