Un testigo de Jehová se sienta junto a un vasco en un vuelo Bilbao-Tenerife.
Cuando el avión ha despegado empiezan a repartir bebidas a los pasajeros.
El vasco pide un whisky doble.
La azafata le pregunta al testigo de Jehová si quiere beber algo.
Contesta el testigo de Jehová con mal tono:
- Prefiero ser raptado y violado salvajemente por una docena de putas antes que una gota de alcohol toque mis labios.
El vasco le devuelve el whisky a la azafata y dice:
- Yo también. No sabía que se podía elegir.
Chiste enviado por mi amigo Xano.
Muchos besos y muchas gracias.
Chiste subido por Ramón el El 2012-08-13 a las 19:12:44
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