El condenado a muerte espera la hora de ejecución, cuando llega el sacerdote:
- Hijo, traigo la palabra de Dios para ti.
- Pierde el tiempo Padre. Dentro de poco voy a hablar con Él personalmente. ¿Algún encargo?
Chiste subido por Ramón el El 2012-06-11 a las 17:58:26
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