Chiste: Un cura muy recto

Érase un cura muy recto y muy santo, en esto que un día oye a un feligrés en la Iglesia que decía:

- Coño, coño, coño, coño...

El cura se le acerca:

- Pero no se da usted cuenta que estamos en la casa de Dios.

- Coño, coño, coño, coño....

- Oiga, por favor, compórtese.

- Verá padre es que lo mío es muy fuerte.

- No lo puede ser tanto como para ofender este santo lugar, cuénteme, ¿a qué se debe su comportamiento?

- Verá, yo soy blanco, mi mujer es blanca, mis padres son blancos, los padres de mi mujer son blancos, mis abuelos son blancos, los abuelos de mi mujer son blancos y ¡he tenido un hijo negro!

El cura:

- ¡Coño!

Chiste subido por Ramón el El 2009-07-31 a las 19:21:35

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