Una mujer enorme y con vestido de tirantes entra en un bar.
Levanta un brazo, lo que le permite enseñar un tremendo sobaco peludo.
Mira a todos los tíos que había allí sentados y les dice, "Es que nadie me va a invitar a un trago?"
Todo el mundo se queda callado y hace por ignorarla, excepto un borracho que estaba al final de la barra que, dando un manotazo en la barra, proclama: "Yo le pago un trago a la bailarina".
La tipa se pide un güisqui solo y se lo hinca de un trago.
Tras lo cual se vuelve a dirigir a los clientes del bar y, levantando de nuevo el brazo y enseñando el sobaco muy peludo, vuelve a decir:
"Es que no hay nadie lo suficientemente hombre aquí que me invite a un trago?".
A lo que el mismo borracho al final de la barra le responde, dando otro golpe en la barra, diciendo "Camarero! Le pago otro trago a la bailarina!".
El camarero, un tanto molesto, se acerca al borracho y le dice:
"Amigo, no es asunto mío si quiere invitar a esa tipa, pero por que insiste en llamarla bailarina?".
Y el borracho le responde:
"Una mujer que es capaz de levantar la pierna tan alto no tiene más remedio que ser una bailarina".
Chiste subido por Ramón el El 2009-02-14 a las 19:23:07
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